Un vehículo es una pieza de ingeniería mecánica y electrónica compuesta por una cantidad innumerable de mecanismos, por lo que, habitualmente, dan lugar a alguna avería. Una de las averías más caras que puede llegar a tener nuestro vehículo es la pérdida o el fallo del cuadro de instrumentos. Este es el panel ubicado normalmente sobre el volante que recoge los indicadores de nuestro coche, como el nivel de aceite, la refrigeración, el estado del motor entro otros; además del cuentakilómetros y el nivel de combustible en depósito.
La avería de este panel es costosa normalmente porque hasta hace poco sólo podía ser reparada en el concesionario original de nuestro vehículo. Por ejemplo, si tenemos un Renault, sólo podían recuperar nuestro cuadro de instrumentos en Renault, que son los que poseían los códigos para el reinicio del mecanismo. Sin embargo, actualmente es posible la clonación de cuadros de instrumentos Renault en negocios profesionales y especializados. Se trata de una alternativa algo más económica e igual de efectiva, por lo que son muchos los que la prefieren. En el concesionario, ante cualquier avería, optan por sustituir el cuadro, volver a codificarlo y listo, siendo una alternativa mucho más costosa; mientras que las empresas profesionales identifican el error y lo reparan.